merceroura

la rebelión de las palabras

¿Quién soy?

Deja un comentario


Nos preocupamos mucho de cómo nos ven los demás, pero olvidamos cómo nos miramos a nosotros mismos.

No nos damos cuenta de qué nos decimos ni con qué palabras nos hablamos y definimos.

No nos paramos a pensar lo que pensamos. Compramos una y otra vez los mismos pensamientos de siempre y repetimos. Nos tragamos la versión cómoda de nuestra vida y actuamos de la misma forma de siempre sin pararnos a darnos cuenta de qué esconde nuestro comportamiento y qué creencias hay tras nuestros pensamientos.

Huimos de esas emociones que nos molestan y nos duelen, nos resistimos a sentirlas y comprenderlas y, claro, siempre quedan pendientes y no podemos usarlas para sacarnos de dentro ese miedo, ese dolor, esa angustia, esa rabia, esa tristeza…

Pensamos que estar triste es de flojos… Yo lo pensaba hace años y acumulaba tanto llanto que la voz se me quebraba.

Pensamos que la rabia y la ira son de malas personas y nos resistimos a enfadarnos y nos reprimimos porque queremos seguir siendo personas correctas y perfectas. Yo me las guardaba para seguir siendo la niña buena.

Pensamos que el miedo es algo a evitar y justamente evitándolo lo convertimos en nuestra meta, en el foco de atención de nuestra vida y acabamos haciendo imprescindible que venga a nosotros aquello que tanto nos asusta…

Nos preocupa quedar bien con todo el mundo menos con nosotros mismos porque nosotros no importamos, no nos damos el valor que tenemos realmente, no nos damos prioridad… Y así luego pasa lo que pasa. Que buscamos situaciones que refrenden esa sensación, esos pensamientos y esas creencias… Porque estar de más, molestar, no importar, no valer, no merecer, nos asusta tanto que inevitablemente vamos a tener que vivir esas situaciones para poder superarlas…

Para darnos cuenta de una vez por todas de que somos nosotros los que nos damos lo que necesitamos.

Somos nosotros los que tenemos que vernos y valorarnos.

Somos nosotros los que decidimos quienes somos y si nos importamos o no.

No podemos delegar en nadie más esa tarea tan importante para nuestra vida.

A veces, nos olvidamos de esto y cargamos a otros con el peso de que nos den algo que no nos damos. Y nadie puede darnos lo que nosotros hemos decidido que no queremos recibir porque no creemos merecerlo.

El principio de todas las historias de amor está en nosotros.

El principio de todo lo bueno que deseamos que llegue a nuestra vida está en nosotros. No hay nadie más que impacte tanto en nuestra vida como nosotros mismos.

Tal vez es el momento de parar y preguntarte…

¿Cómo me veo a mí mismo?

¿Cómo me trato?

¿Cómo me hablo?

¿Qué importancia me doy?

¿Qué siento? ¿Qué necesito? ¿Qué deseo de verdad?

¿Quién soy?

Gracias por leerme… Escribo sobre lo que siento o he sentido y el camino que he hecho hasta llegar aquí (aunque todavía estoy a medio camino de algún lugar). En este camino he aprendido poco a poco a aceptarme y amarme (aún me falta mucho, soy consciente).

Si quieres saber más de autoestima, te invito a leer mi libro “Manual de autoestima para mujeres guerreras”.

En él cuento como usar toda tu fuerza para salir adelante y amarte como mereces y dar un cambio a tu vida… Ese cambio con el que sueñas hace tiempo y no llega.

Disponible aquí 

amazon llibre merce amazon

Si quieres saber más de mí, te invito a entrar en mi web y conocer lo que hago. Acompaño a personas y organizaciones a desarrollar todo su potencial a través del coaching, el mentoring y la Inteligencia Emocional. 

www.merceroura.es 

Anuncio publicitario

Autor: merce roura

Amo la imprudencia de mis palabras...

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s