Eres lo que imaginas. Lo que buscas. Lo que piensas. Las doce veces que miras el reloj o lees mensajes en el teléfono mientras alguien te habla. La palabra amable que le has dedicado al compañero cabizbajo y que le ha hecho erguir la cabeza.
Eres lo que engendran tus ideas, lo que sueñas y te repites como una oración. La mueca estúpida que haces cuando caminas por la calle y alguien te disgusta. El gesto desagradable que le has regalado al vecino… La mirada de cariño que almacenas esperando un leve roce. El abrazo que aguarda un esbozo de amor y que tu cuerpo espera como la tierra seca espera la lluvia. Eres todo lo que piensas que podrías ser si no te faltaran agallas. Ese pez contenido tras el cristal que nota aún el vaivén del mar surcarle la cola. El viajero que casi toca el descanso mirando al horizonte mientras sus pies cansados ensayan como terminar el camino. Eres el camino.
Eres lo que amas. Eres lo que rezas y demasiado a menudo lo que temes. Eres un pedazo enorme de lo que huyes. Lo que abrazas y lo que repeles. Lo que decides y lo que postergas… Cada una de tus dudas y tus aciertos. Cada uno de tus benditos errores.
Eres lo que tu deseo se atreve casi a gozar y tu vergüenza contrae. Lo que tu vista cansada busca y tu boca ávida casi degusta. Eres tu remedio y tu propia medicina. Tu dosis letal de crítica. Tu risa loca y tu llanto apagado. Eres lo que detestas y lo que te hace vivir. Lo que te mueve y atormenta. Lo que te hace saltar y correr. Y Lo eres porque lo llevas dentro y sabes que tarde o temprano, te dejarás llevar y saldrás de ti mismo.
Eres cada uno de los límites que te dibujas. Tú te recortas y amplías. Tú decides dónde acabas y dónde empiezas.
Eres un pedazo de tierra enorme sin principio ni fin. Un grano de arena minúsculo.
Eres lo que necesitas. Lo que batallas. Lo que jamás te atreverás a reconocer. Lo primero que te viene a la mente cuando te levantas y lo último en que piensas antes de dormir cada noche. Eres lo que arriesgas. Lo que te ilusiona.
Me encanta!. Tu decides atender me cuando estoy llenó de preguntas. Tu decides darme respuestas cuando mi alma espera. Tu decides darme afectos cuando mi corazón titubea.
No se si haras una introducción,un monólogo antes de escribir algo,una sinopsis de lo que vas a escribir..pero si este lo has escrito asi,a vuela pluma,tu cabeza,tu parte sentimental del cerebro,tu»angel que te dicta»,..no eres una sola persona..TIENES EL CORAZÓN DEL MUNDO,SU PALPITO,EN TU CABEZA..Y CADA CUANTO NOS DEJAS SENTIR UNA PARTE
No hago nada de eso, escribo… A veces repaso más y otras menos. Lo hago a borbotones, no puedo evitarlo, las palabras se agolpan en mi cabeza, quieren salir… Siempre pasa igual, si no las saco, me pongo nerviosa, casi duelen… Gracias 🙂
merceroura 
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8 de septiembre de 2013 en 15:16
Me encanta!. Tu decides atender me cuando estoy llenó de preguntas. Tu decides darme respuestas cuando mi alma espera. Tu decides darme afectos cuando mi corazón titubea.
Besos y felicidades!!!
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6 de septiembre de 2013 en 22:44
Eres un ser maravilloso que compone música con las palabras… para conseguir una «sinfonía de contagio» en movimiento 🙂
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6 de septiembre de 2013 en 22:57
De lo más bonito que me han escrito!!No lo merezco pero espero merecerlo algún día. Soñaré con ello, lucharé para serlo… Gracias 🙂
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6 de septiembre de 2013 en 13:50
No se si haras una introducción,un monólogo antes de escribir algo,una sinopsis de lo que vas a escribir..pero si este lo has escrito asi,a vuela pluma,tu cabeza,tu parte sentimental del cerebro,tu»angel que te dicta»,..no eres una sola persona..TIENES EL CORAZÓN DEL MUNDO,SU PALPITO,EN TU CABEZA..Y CADA CUANTO NOS DEJAS SENTIR UNA PARTE
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6 de septiembre de 2013 en 19:36
No hago nada de eso, escribo… A veces repaso más y otras menos. Lo hago a borbotones, no puedo evitarlo, las palabras se agolpan en mi cabeza, quieren salir… Siempre pasa igual, si no las saco, me pongo nerviosa, casi duelen… Gracias 🙂
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